La mayoría de los incendios eléctricos tienen su origen en circuitos sobrecalentados y equipos sobrecargados. Cuando se abusa, el aislamiento puede fundirse o quemarse, dejando al descubierto los cables con tensión. Los incendios eléctricos pueden ocurrir cuando se sobrecargan los equipos y se sobrepasa su capacidad, o cuando la acumulación de aceite o suciedad provoca el sobrecalentamiento de un motor, o cuando se producen chispas que encienden desechos, suciedad, polvo o líquidos inflamables.
Visualice su plan de respuesta en caso de incendio para poder actuar con rapidez si llegara producirse uno.
Tenga en cuenta: